El tacto favorece la identidad de marca de empresas al suponer una doble interacción de los consumidores con los productos. El tacto puede también ser considerado como una forma para controlar la “inconsciencia de los consumidores, sus percepciones, sensaciones y preferencias”, declara un estudio de la Hamsltad University.
Te compartimos dos casos que ejemplifican la importancia del tacto en la decisión de compra.
Caso 1. A finales de la década de los 90 la venta al por menor de electrónica de consumo estaba sufriendo una crisis importante en Estados Unidos y en todo el mundo. Numerosas tiendas y cadenas estaban por entonces cerrando y Apple, con Steve Jobs al mando, decidió apostar por una estrategia de retail para acercar los productos de la marca a los consumidores.
La experiencia de entrar en una Apple Store es única en el mundo de la electrónica y gira en torno a la posibilidad de utilizar los productos, de estar en contacto directo con los mismos, tocarlos y sentirlos, sin la intermediación de representantes de la empresa o trabajadores.
Caso 2. Otro caso destacable es el de Heineken. La conocida compañía holandesa de cerveza lanzó al mercado una versión de sus latas con relieve con el fin de intensificar la relación de los consumidores con la marca gracias para convertir el sentido del tacto en un gran aliado de los profesionales del marketing por tener un componente tanto físico como psicológico. En el siguiente vídeo puedes ver la campaña que acompañó el lanzamiento de dicho producto.