Para llegar a una experiencia de compra es preciso seguir ciertos principios que existen y que se han establecido con el tiempo.
Principio 1: El cliente es la persona más importante en su negocio
Este es un principio muy difundido pero que muchos no logran entender ni manejar del todo. El cliente está en constante cambio y el negocio debe estarlo también. Por lo tanto, el cliente debe ser el centro del negocio y todo lo que se haga debe girar en torno a él.
Principio 2: Atención a los detalles
Este es el principio más famoso del retail: el detalle. Cada negocio es distinto; por eso recalcamos nuestro primer principio, el cliente es el núcleo, conociendo bien al cliente se podrá conocer cada detalle que él valora o desagrada. Y no solo eso: si se llega a conocer esos mínimos detalles de los clientes se podrán predecir sus comportamientos y brindarles una mejor experiencia de compra. También se podrá sorprenderlos con nuevas estrategias que se verán reflejadas en una mayor fidelización y más compras. La comprensión de los detalles es una habilidad clave para dominar el comercio minorista.
Principio 3: Tu lugar, tu espacio
Cada año aumentan las compras a través de Internet a nivel mundial. Ciertamente, este canal nos ahorra tiempo. En este punto es donde cobra vital importancia la tienda, ese ambiente donde el cliente permanecerá por segundos, varios minutos u horas. Esto último solo depende de la estrategia.
El espacio destinado a la venta de productos y/o servicios y cómo está ambientado hará que, el cliente que cada vez tiene menos tiempo para hacer sus quehaceres, use ese tiempo en visitar el establecimiento. Allí jugará un rol importante la ubicación, detalles como el estacionamiento, la facilidad para llegar, los probadores o pasadizos amplios, una buena iluminación, la limpieza y más complementos que el cliente tomará en cuenta antes de visitar el establecimiento.
Toma en cuenta y analiza el negocio de tu cliente o prospecto. ¿Está cumpliendo con estos básicos e importantes principios? Si la respuesta es no, es hora de llamarle.